
Hay quien dice que guarda relación con el "menú turístico" impuesto por el Ministerio de Turismo del gobierno de Franco.

Según la versión más generalizada en España, el menú del día, tan común en los restaurantes y tascas más modestas, tiene su origen en el menú turístico impuesto por el Ministerio de Información y Turismo del régimen franquista en 1964. No obstante, la realidad es algo más complicada y parece que algo de inspiración les llegó a los técnicos del Ministerio desde el país vecino que conocía un menú muy semejante desde un siglo atrás: Francia.
El precio obligatorio y muy bajo no hizo gracia a los mesoneros, que no le podían sacar ningún beneficio, y el menú turístico cobró pronto fama de muy mediocre por sus ingredientes de escasa calidad. Así que no fue un verdadero éxito hasta que se liberalizaron los precios. El ejemplo francés también contó: Allá los precios siempre fueron libres, y aunque la base del menú del día era que costaba bastante menos que comer a la carta, no era ruinoso para el restaurante.